Bueno hoy más que análisis vamos a hacer una pequeña crítica de lo que ocurre con y en la televisión colombiana
Comencemos por todo lo relacionado con la televisión. Hoy más que nunca creo que quienes componen la Comisión Nacional de Televisión no le sirven para nada a los colombianos y que es un foco burocrático del Estado donde no se hace nada por el bienestar de la comunidad, es increíble que hayan recibido únicamente la postulación del Grupo Planeta de España para la adjudicación el 27 de Julio del tercer canal privado de Televisión sin tener en cuenta las observaciones que Pacsa Prisa y el conglomerado Cisneros le hicieron al proceso.
Los grupos en desacuerdo argumentan que la Comisión Nacional de Televisión no atendió los vacíos que esas organizaciones encontraron en el proceso licitatorio pues entre otras cosas solo hay cuatro comisionados de cinco que deberían integrarla y tampoco hubo claridad en cuanto al porcentaje de inversión extranjera permitida para la prestación del servicio público de televisión ¿Seré muy avezado si propongo que los términos se fijaron para que se acomodaran al grupo español?
Se supone que para esa adjudicación debe proveer el proceso de una pluralidad de oferentes, es decir más de uno, y teóricamente el proceso licitatorio se debió haber caído cuando solo un grupo se presentó a la oferta, pero por alguna razón desconocida todo sigue adelante y no hay una respuesta a los ciudadanos por parte de la CNTV a lo que ocurre en esa adjudicación.
El Consejo de Estado en cabeza de Fernando Álvarez aseguró que el canal no puede ser adjudicado con un solo proponente. El concepto emitido por el organismo estatal está basado en la Constitución Política Colombiana y por tal razón es inmodificable. ¿Qué se puede esperar? Hay dos opciones, que la ley y quienes la ejecutan se hagan sentir y limpien el proceso para que otros intervengan o que siga adelante y una vez más se pisotee la carta magna colombiana y de paso a los colombianos.
Por otro lado quiero confesar algo, no puedo con la novela de RCN televisión que ocupa el "prime time" de su franja: A Corazón Abierto. Me parece un remedo barato y una absoluta ´colombianada` para televisión y es triste porque el producto original, el norte americano (Grey´s Anatomy), tiene una pulcritud y perfección tanto en la historia como de producción sin igual, se nota que es una serie muy bien pensada y creada como una joya, con el mayor cuidado y pulso de un artesano. Así sea gringo.
La respuesta que he escuchado en algunos foros y "las buenas noticias del entretenimiento" es que es una adaptación del la serie original. Sin embargo, las situaciones son acomodadas al machetazo de la "realidad colombiana", hay actuaciones sosas, los doctores en vez de dar un diagnóstico pareciera que recitan las enfermedades y procedimientos, las historias que se cuentan de los pacientes parecieran protagonizadas por los invitados al programa del padre Chucho.
Personajes como los de Miranda, Cristina, Masa, María Alejandra y otros como el personaje que hace Santiago Moure carecen de verosimilitud en comparación al seriado original que entra a su séptima temporada. Aquí lo que se hizo es otro novelón para estrellitas colombianas.
Pero no todo es tan malo, se puede rescatar la actuación de Alejandra Borrero, y el actor que personifica a Jorge, medianamente la de Jorge Cao y meritorio el trabajo de maquillaje.
Aquí el cuento no es que entre un tercer canal privado de televisión a operar para que así la gente tenga otra cosa que ver, el rollo es que las condiciones económicas de las personas les permitan dar un vistazo a la televisión de afuera para así crear un juicio.
Pero personas que viven en otro planeta como Dago García y Fernando Gaitán aseguraron en un foro, desarrollado en la universidad Javeriana denominado Narconovelas ¿cuánto es demasiado?, que el ochenta por ciento de los colombianos tenían acceso al cable o parabólica que llamamos comúnmente y que si vemos las novelas de los canales privados de Colombia es porque nos gustan y no porque falte pluralidad y no es responsabilidad del canal que la gente vea ese tipo de productos, porque ellos no están obligando, solo los crean y los emiten.
Si, es posible que haya gente que adore esas novelas y se emocione viéndolas, sea del contenido que sea, pero cuando no hay para dónde más mirar sino para el frente, pues obviamente la gente se conforma con lo que ve. Muchísima gente en Colombia ve sus novelas porque toca, porque no tienen otra herramienta de entretenimiento o posibilidades de viajar cada fin de semana o cambiarle el ambiente al cerebro, no creo que sea agradecimiento por parte del público a estas magnas producciones.
Una persona pobre, que trabaja todo el día, que quiere llegar a dormir pero tiene que hacer de cenar, revisar las tareas de los niños, se gana el salario mínimo y sostiene a su familia ¿puede pagar el servicio de cable y satisfacer sus demás necesidades? Sinceramente no lo creo, a duras penas muchos de esos ciudadanos comen dos veces al día, por consiguiente considero que el “rating” que marcan esos seriados ya son manipulados desde el mismo bolsillo y posibilidades de pluralidad televisiva que tienen los colombianos.
Les dejo el link del video proyectado en el Foro realizado por la Especialización en Televisión de la Universidad Javeriana, de Bogotá, Colombia, el 20 de mayo de 2010
http://www.youtube.com/watch?v=1J0Nit_QFEQ